
-¡Pues para ti! No sé que les veis.
-Bueno, podría ser la única persona a la que le podría contar todo y que me entendiera y siempre me escucharía, pasase lo que pasase.
-Mimi, cariño, que no es un extraterrestre solo es un gay. Sigue siendo tío y como tal no puede hacer nada de eso. Lo máximo que puede pasar es que te toque una teta sin empalmarse, darte picos delante de la gente para creerse mejor e incluso te obliga a ponerte tacones y todo tipo de ropa que no te pondrías hasta los 23 años con la escusa de que el sabe lo que le gusta a los tíos y nosotras no. ¿Aún sigues queriendo tener un amigo gay?
-Pues si, por lo menos me diría buenas formas de vestirme.
Miré a Mimi con la cara un poco entre medio del asco y lo espeluznante. ¿Como una chica podía ser tan... imbécil? Idiota... Pondría una mano al fuego de que si llegara a tener un amigo gay, se enamoraría de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario